A veces no es real la imagen que el espejo nos muestra
no nos reconocemos en ella
no nos gusta lo que somos
nos vemos
como el patito feo del cuento
Y si probásemos a sonreír
sólo para él,
para que el espejo nos vea
y nos devuelva la sonrisa
y nos muestre
una imagen bella
Y si aprendemos a mirarnos
de forma diferente
y nos plantamos
delante del espejo
con valentía
y con la debida indulgencia
y escondemos culpas y miedos
Y si probamos a olvidarnos del ayer
y empezamos a querernos de verdad
sin importarnos lo que piensen los demás
y dejamos que asome de una vez
ese hermoso cisne que llevamos dentro
Carmen Rocamora
(contadora de historias)
6 de abril de 2013
Pero es que yo cuando me miro al espejo veo lo que yo quiero ver, porque él a veces se confunde. Me gusta tu espejo
ResponderEliminarHaces muy bien, tú si que eres sabia mi querida Ester. Un beso :)
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